La oruga bolillera amenaza la soja en zona núcleo

Una alerta en la región pampeana despertó la atención de los productores sojeros. “Todos los que tengan cerca una leguminosa de invierno, tanto vicia, alfalfa, arveja, lenteja, garbanzo y otros, luego de las lluvias van a ir a monitorear los lotes con soja emergida por bolillera o Helicoverpa gelotopoeon”, destacaba en su cuenta de Twitter el Ing. Ag. Mariano Luna, especialista en Manejo de Plagas Agrícolas y Tecnología de Aplicación de Fitosanitarios de INTA EEA Pergamino.

Hace ya cerca de 15 días, que se detectó en trampas de luz de la estación INTA MJ, un importante número de adultos de esta plaga, explicado en gran medida por la presencia de bolillera en las leguminosas de invierno. Esto hoy nos da como resultado ya un stand importante de larvas pequeñas en el cultivo de soja de 1°, sobre todo en lotes aledaños a los de vicia, alfalfa, arveja, lenteja, garbanzo por ejemplo.

Los ataques de Oruga bolillera (Helicoverpa gelotopoeon) en el cultivo de soja exigen dar un paso adelante.

Helicoverpa gelotopoeon, más conocida como “bolillera”, es una plaga que desde hace un tiempo ha crecido en abundancia en la región pampeana y viene generando problemas en el cultivo de soja, tanto en los primeros estadios vegetativos, como cuando el cultivo de soja está formando sus granos.

Las larvas de esta especie alcanzan un tamaño máximo de 30-35 mm.

Cuando las plantas están entre los estadios V1 a V2 (vegetativo, 1 a 2 hojas verdaderas), esta isoca tiene preferencia por el consumo de brotes, tallos tiernos y, en menor medida, de hojas. Si las condiciones ambientales son benignas, la planta puede recuperarse pero emitiendo brotes axilares, lo cual no solo afecta la altura de las plantas sino también el rendimiento de las mismas.

A monitorear. Frente a lo registrado se sugiere monitorear cada lote en particular, a fin de determinar presencia y medidas de control de la plaga. El monitoreo y respetar los umbrales será la clave de éxito en el control de esta plaga.

Los umbrales de control son los siguientes:

• 10% de plantas con larvas en brotes

• 1 a 2 larvas/planta, mayores a 1cm de tamaño (soja a 35cm)

En el caso de observar solo la presencia de huevos, se sugiere tratar de demorar la aplicación química, a fin de no tener que repetir el tratamiento en el corto plazo.

Cuando aparece en estados vegetativos de la soja, la oruga bolillera debe ser controlada porque actúa como desbrotador además de defoliadora. Controlarla a tiempo dentro del cultivo es imprescindible, ya que luego se torna muy difícil sacarla del lote y en etapas de maduración también ataca chauchas.

La Solución Adama. “La recomendación es elaborar una estrategia de aplicación temprana”, afirma Albano Aranguren, Gerente de Desarrollo Técnico de Mercado de Adama. Puntualmente, se recomienda hacerlo con una solución como Rimón Fast, “un producto de amplio espectro, que no sólo estaría controlado esta plaga sino que también nos estaría protegiendo de inminentes ataques de trips”. Además cuenta con muy buena residualidad: la aplicación anticipada de Rimón Fast en estadios vegetativos - en dosis de 200cc + Ac, y nunca subdosis- permitirá proteger estos estratos del cultivo por más de dos semanas. En estadios reproductivos no recomendamos usar Rimón Fast para bolillera.

Por último, Rimón Fast es la Solución Adama que aporta muy buen control de oruga bolillera en estadios tempranos del cultivo de soja así como muy buen control de “oruguita” de la verdolaga (Loxostege bifidalis) y otras especies como trips, tucuras y defoliadoras. Su aplicación a tiempo habilita el manejo anticipado evitando picos poblacionales de la plaga. Asímismo opera en la supresión de ácaros y tiene registro en el control de tucuras saltonas. Y un punto no menor a la hora de ajustar los números, posee la mejor relación costo/beneficio, con el menor costo- dosis por día de protección.