PROTEGE TU CULTIVO DE PAPA CONTRA LA AMENAZA DE Phytophthora infestans
La “rancha” Phytophthora infestans es una de las enfermedades más importantes y dañinas de la papa, ya que se desplaza rápidamente a través del viento, a menudo devastando un cultivo completo (Centro Internacional de la Papa [CIP], 2008)
Esta enfermedad se desarrolla en temperaturas de 12 a 15 °C con humedades relativas de 95 a 100%, destruyendo los sembríos en lapsos de 10 a 15 días llegando a dejar pérdidas totales.
Cabe mencionar, que la mayor de área de producción se encuentra en las regiones de la sierra, en donde se siembra más del 95% de las áreas, en donde la mayoría de los casos las condiciones no son muy favorables, por lo que esto puede ocasionar que los cultivos presenten diferentes problemáticas.
El cultivo de papa es afectado por numerosos organismos que, en determinadas condiciones, causan daño económico. Los patógenos de la papa afectan el rendimiento y la calidad de las cosechas y son insectos, hongos, bacterias, nemátodos y virus los cuales dañan hojas, tallos o tubérculos; alteran el crecimiento de las plantas; causan pudriciones o malformación y afectan la apariencia comercial y calidad culinaria de los tubérculos.
Conoce a Phytophthora infestans
La rancha, Phytophthora infestans, es un hongo parasitario que produce una enfermedad conocida como “Tizón tardío o hielo”. Este hongo es visible en las hojas, tallos, y tubérculos, logrando grandes pérdidas. Después de la cosecha, las estructuras de propagación de la rancha permanecen en los restos de la planta y tubérculos. Cuando se reinicia la campaña agrícola de papa y las condiciones ambientales son favorables, el hongo inicia la infección en nuevos campos del cultivo de la papa.
Condiciones favorables para la presencia de la rancha
- Alta humedad del ambiente (70 a 90 %) originada por las lluvias continuas, lloviznas permanentes y neblina durante 3 a 4 días en forma continua.
- Temperatura del ambiente de 15 a 20 °C por un tiempo no menor de 4 horas por día.
- Lluvias interrumpidas con horas del sol; estas condiciones crean microclima al pie de la planta y la rancha empieza a aparecer en las hojas más viejas.
- Alta densidad de siembra o sea plantas de papa muy juntas.
Ciclo biológico de la rancha
Asexual:
En agua libre y con bajas temperaturas, los esporangios germinan indirectamente produciendo zoosporas uninucleadas y biflageladas. Las zoosporas se forman dentro del esporangio y son liberadas cuando se rompe la pared esporangial a nivel de su papila, lo cual permite a las zoosporas nadar libremente.
Las zoosporas se enquistan sobre superficies sólidas, es decir, se detienen, adquieren una forma redondeada y forman una pared celular. Luego, en presencia de humedad, pueden desarrollar un tubo germinativo y penetrar a la hoja por los estomas, o formar el apresorio, de tal manera que la hifa de penetración ingresa directamente a través de la cutícula. Una vez dentro de la planta, el micelio se desarrolla intercelularmente formando haustorios dentro de las células. Ocasionalmente se forman haustorios en forma extracelular.
Cuando la temperatura es mayor a 15° C, los esporangios pueden germinar directamente, formando un tubo germinativo que penetra la epidermis de la hoja e infecta al hospedante.
Sexual
Los gametangios se forman en dos hifas separadas, por lo que P. infestans es heterotálico. Así, ambos tipos de apareamiento A1 y A2, deben estar presentes para que ocurra la reproducción sexual.
La unión de los gametos ocurre cuando el oogonio atraviesa el anteridio y ocurre la plasmogamia. Esto conduce a la fertilización y al desarrollo de una oospora con paredes celulares gruesas. La oospora es fuerte y puede sobrevivir en los rastrojos.
Bajo condiciones favorables, la oospora produce un tubo germinativo que forma un esporangio apical, el cual puede liberar zoosporas o formar nuevamente un tubo germinativo, los cuales sirven como inóculo primario.
Síntomas de la rancha en los órganos de la planta
En las Hojas:
Las manchas son de color marrón claro a oscuro, de apariencia húmeda, de forma irregular, algunas veces rodeadas por un halo amarillento, no están limitadas por las nervaduras de las hojas.
Estos síntomas se presentan inicialmente en los bordes y puntas de las hojas. Bajo condiciones de alta humedad, se forman en la cara inferior (envés) de las hojas unas vellosidades blanquecinas que constituyen las estructuras del patógeno (esporangióforos y esporangios).
Las lesiones se expanden rápidamente, se tornan marrón oscuro, se necrosan y causan la muerte del tejido.
En los Tallos y peciolos:
Las lesiones son necróticas, alargadas de 5 – 10 cm de longitud, de color marrón a negro, generalmente ubicadas desde el tercio medio a la parte superior de la planta, presentan consistencia vítrea.
Cuando la enfermedad alcanza todo el diámetro del tallo, éstas se quiebran fácilmente al paso de las personas, equipos agrícolas o de vientos fuertes.
En condiciones de alta humedad también hay esporulación sobre estas lesiones pero no muy profusa como se presenta en las hojas.
En los Tubérculos:
Los tubérculos afectados presentan áreas irregulares, ligeramente hundidas. La piel toma una coloración marrón rojiza.
Al corte transversal se pueden observar unas prolongaciones delgadas que van desde la superficie externa hacia la médula a manera de clavijas.
En estados avanzados se nota una pudrición de apariencia granular de color castaño oscuro a parduzco, en estas condiciones puede ocurrir una pudrición secundaria causada por otros hongos (Fusarium spp.) y bacterias (Erwinia spp. Clostridium spp. etc), provocando la desintegración del tubérculo y haciendo difícil el diagnóstico.
¿Cuáles son las técnicas más efectivas para controlar la “rancha”?
Existen 3 clases de manejo que son importantes para esta enfermedad:
- Componente genético: Utilizando variedades tolerantes a la enfermedad.
- Componente cultural: Evitando la siembra en terrenos que tengan mal manejo del drenaje, también creando una rotación con otros cultivos como maíz, trigo, arveja, entre otros. Fertilizando los suelos adecuadamente (priorizando el fósforo y potasio) y sembrando a mayor distanciamiento entre surcos y planta para optimizar la ventilación.
- Componente Químico: Usando fungicidas de contacto cuando se presenten condiciones favorables para la “rancha" y combinarlo con fungicidas sistémicos cuando se observen los primeros síntomas de la enfermedad.
No hay que olvidar que el uso de los fungicidas debe ser de manera racional, siguiendo las recomendaciones que se indican en la etiqueta y del experto de campo
¿Cómo actuar de manera eficaz?
La mejor forma para controlar la “rancha” Phytophthora infestans es usando dos de nuestras soluciones: fungicidas: uno que tenga acción de contacto y otro sistémica, pero también existen soluciones capaces de integrar ambos modos en un solo frasco:
Fungicida de acción sistémica local (translaminar) y de contacto, con efecto preventivo y curativo que penetra a través de las hojas con tres ingredientes activos formulados.
- Hidróxido de cobre: Tiene acción multisitio en el patógeno. Inhibe la germinación de esporas. Traspasa las barreras de la pared celular y menbranas de los hongos sin selectividad al patógeno.
- Cymoxanil: Inhibe múltiples procesos celulares como la síntesis de ADN y ARN, síntesis de aminoácidos, respiración micelar y permeabilidad de la menbrana celular. Inhibe el crecimiento del patógenos en hojas tratadas, daña o previene el desarrollo de haustorios e inicia la respuesta del hospedero.
- Mancozeb: Tiene acción multisitio, los aniones formados de la sal son la base de actividad mediana por complejos con enzimas que contienen cobre o grupos sulfidrilos, lo que los lleva a su inactivación.
Esto se traduce en los siguientes beneficios:
- Efecto sistémico local.
- Acción preventiva y curativa.
- Tres ingredientes activos formulados.
- Combinación de dos fungicidas de contacto y un fungicida sistémico.
Recomendaciones de uso en dosis: 2.0 kg/ha.
Potente control de la “rancha” por dentro y por fuera ya que posee dos ingredientes activos.
- Fluazinam: Fungicida de contacto y de amplio espectro capaz de proteger la planta de manera preventiva. Tiene también efecto antiesporulante e impide que la enfermedad avance en las plantas tratadas.
- Dimetomorf: Fungicida sistémico con actividad preventiva y curativa que afecta en la formación de la membrana celular del hongo. Otra ventaja es que posee alta resistencia al lavado por las lluvias.
Esto se traduce en los siguientes beneficios:
- Dos modos de acción están presentes en un solo producto.
- Posee alta residualidad por su efecto preventivo y curativo.
- Control en todo el ciclo del desarrollo del hongo.
- Simplifica el manejo de resistencias.
Recomendaciones de uso en dosis: 0.75 - 1.0L/ 200 L y 1.7 - 2.3 L/ha
Aquí es donde esta poderosa solución puede brindarte todo lo que buscas en un solo lugar.
Conclusión
El establecimiento de un adecuado Manejo integrado del patógeno es la principal estrategia que todo productor debe considerar, sobre todo integrar un plan de aplicaciones donde se consideren los diferentes grupos químicos para evitar la resistencia del patógeno y obtener altos rendimientos.
Bibliografía
- Perez, W & Forbes, G. (2008). Manual técnico: El tizón tardío de la papa. Recuperado de https://cipotato.org/wp-content/uploads/2014/08/004271.pdf
- Hooker, WJ 1986. Editor. Compendio de enfermedades de la papa. Prensa de la Sociedad Estadounidense de Fitopatología. San Pablo, Minnesota.
