El fantasma de la “chinche de los cuernos” en maíz
Los lotes de maíz de la región pampeana principalmente tienen un fantasma. La “chinche de los cuernos” y los efectos de sus picaduras generan pérdidas importantes de plantas y gran desuniformidad temporal y espacial en los cultivos. Además, pone en riesgo el potencial de rendimiento esperado.
Poner foco sobre esta plaga es una tarea fundamental si consideramos que el daño causado por chinches durante inicio del ciclo el cultivo, impacta negativamente en las características productivas del maíz durante todo el ciclo.
Juan Dall’ Orso, Director de Agroconsultor, asesor privado y especialista en manejo de maíz nos acerca algunas claves para alejar fantasmas.
1. Descripción de la plaga
Su principal característica morfológica es que posee el primer segmento del tórax expandido en forma de espinas agudas (conocidas como cuernitos). Tiene una longitud en estado adulto de unos 10 a 12 mm y su coloración dorsal puede variar entre grisáceo y castaño oscuro, mientas que su abdomen es verdoso. Presenta un estilete largo, con el que logra alcanzar el punto de crecimiento, provocando el macollaje.
Hay dos especies conocidas: furcatus y melacantus, aunque solo la primera está presente en Argentina.
2. Más biología, mejor manejo
Los adultos permanecen en el rastrojo durante el invierno, resguardándose de las bajas temperaturas. Los inviernos rigurosos disminuyen la población. Pasan por un período de inactividad durante los días cortos (diapausa), donde no se reproducen y la alimentación es prácticamente nula y su ciclo se acorta sin malezas en el lote (si no hubiera otro alimento).
Con la llegada de la primavera y las temperaturas templadas, es común verlas sobre el rastrojo.
3. Manejo de barbechos para evitar hospederos de la plaga
Esta plaga se resguarda debajo de rastrojos y malezas, especialmente crucíferas, aunque se las ha encontrado también en otras plantas hospedantes como brachiaria, commelina o trigo. Por lo tanto, mantener el lote libre de malezas durante el barbecho es una buena medida de control.
4. Daños en maíz, los estadios más afectados
Ataca en estadios tempranos de desarrollo del cultivo, introduciendo su estilete, succionando nutrientes e inyectando toxinas. Cuando se están alimentando, se posicionan en la base del tallo, con la cabeza hacia abajo. Los mayores daños se producen cuando coinciden alta incidencia de la plaga, estadios tempranos del cultivo (V1 a V3) y períodos de sequía.
Los lotes atacados por esta plaga presentan síntomas muy variados que incluyen perforaciones en hojas, plantas más pequenas, desuniformidad temporal que determina plantas dominadas, plantas achaparradas, macollaje, muerte de plántulas y espigas más pequeñas.
Existe una escala de daño para determinar los distintos niveles con sus respectivas pérdidas por planta afectada (elaborada por Rodolfo Bianco y adaptada por la Fundación ABC, Brasil):
Nivel 0 > sin daño
Nivel 1 (10% pérdida) > Hojas perforadas sin reducción de tamaño de planta
Nivel 2 (30% pérdida) > Hojas perforadas, parcialmente acartuchadas con leve reducción de tamaño de planta
Nivel 3 (60% perdida) > Plantas acartuchadas, achaparradas, macolladas y con fuerte reducción de tamaño
5- Monitoreo, ¿sí o no?
Se recomienda realizar el monitoreo de la plaga en las horas de temperaturas moderadas. Suele resultar dificultoso porque lleva mucho tiempo y no siempre se encuentran las chinches. Es indispensable revisar sectores con malezas.
La plaga “se muestra” más cuando el cultivo de maíz emerge.
Se han propuesto algunos métodos de detección de la plaga previa a la siembra del cultivo en base a trampas.
> Trampa con soja (Rodolfo Bianco, Brasil)
Remojar 300 gr de soja durante 15´
Dejar escurrir y adicionar sal
Dividir el contenido para 10 trampas
>Trampa con chauchas verdes (Fundación ABC, Brasil)
Poner 10 chauchas por estación de muestreo
En ambos casos, se trata de áreas de 50 cm x 50 cm, en 10 lugares del lote, debiendo monitorear a la mañana siguiente, contando la cantidad de trampas con chinches.
Estos métodos de monitoreo, si bien son de importante ayuda en la toma de decisión, no fueron muy eficaces para nuestra situación.
6- Momentos recomendados de control/ Umbrales
En función al monitoreo con trampas, en Brasil se recomienda la siguiente estrategia de manejo (Pioneer Semillas, adaptado de Rodolfo Bianco)
Cabe destacar que Argentina no cuenta con un tratamiento de semillas insecticida con dosis ajustada para el control de esta plaga, con lo cual es necesario pasar a aplicaciones de cobertura con insecticidas específicos.
Para Brasil, el nivel de acción para tratamientos de cobertura se ubica en 2 chinches/m2. En el caso de Argentina, con una tasa de desarrollo inicial menor y un potencial de cultivo mayor, se recomienda trabajar con niveles por debajo de 1 chinche/m2.
Las aplicaciones deben realizarse entre pre siembra y V2, obteniéndose los mayores controles en el inicio de la emergencia, ya que durante la presencia del cultivo las chinches están más expuestas. Además, las chinches son controladas al succionar, pero también al caminar sobre rastrojo y material verde que presenten insecticida.
Las mezclas de neonicotinoides + piretroides presentan mejores controles que piretroides solos.
Los daños disminuyen luego de V2, ya que la toxina deja de ser tóxica.
Es posible encontrar daños aún habiendo tratado el lote, porque para obtener efecto con los neonicotinoides es necesario que piquen y succionen el producto contenido en la planta.
No hay productos registrados para esta plaga en el cultivo de maíz, actualmente se usan los recomendados para soja.
Desde Adama Argentina, el Ing. Agr. Juan Pablo Cristofalo integrante del equipo de Estrategia de Mercado y líder del cultivo de maíz, resalta que es clave el monitoreo y el barbecho del lote.
En cuanto a avances en desarrollo, se refiere a la aplicación de GALIL 250 cc/ha en los estadios fenológicos del cultivo VE a V2 y teniendo en cuenta los umbrales indicados anteriormente por Dall Orso.